Londres.- La cantante Britney Spears llega a Europa esta semana, concretamente a Londres, con su última gira tras haber pasado los últimos meses recorriendo EEUU y Canadá para mostrar su nuevo montaje, claramente influenciado por el espectáculo del circo.
La cantante estadounidense, conocida en sus inicios como "Princesa del pop" y heredera de Madonna, se estrenará en el continente europeo este miércoles con un concierto en el recinto "O2 Arena" de la capital británica, donde en sólo 12 días actuará 8 veces, para deleite del público londinense.
De ahí seguirá recorriendo el Reino Unido y pasará por Manchester (Inglaterra) y Dublín (Irlanda), desde donde viajará a Francia, Bélgica, Dinamarca, Suecia, Finlandia, Rusia, Polonia y Alemania, según aparece en su página web oficial.
La gira mundial comenzó el pasado 3 de marzo y lleva el nombre de su último disco, "Circus".
Ésta es la primera gira de la artista en los últimos cinco años, un espectáculo con el que recrea la escenografía del circo y en el que siguen jugando un papel esencial las coreografías de Britney Spears junto a sus bailarines.
La artista, quien se convirtió en un icono adolescente durante sus primeros trabajos, es la autora de seis álbumes -incluido este último que presenta en directo ahora-, de los que ha vendido más de 60 millones de ejemplares, según la promotora de la gira, AEG Live.
La carrera de Britney Spears ha estado salpicada de cierta polémica casi desde sus inicios y se deterioró sensiblemente durante los últimos años, cuando la joven, de 27 años, sufrió diversos problemas personales.
De sus conciertos en EEUU y Canadá se ha conocido -a través principalmente de imágenes colgadas en el portal Youtube- que la cantante gritó de susto en medio de una actuación después de que un individuo del público subiera a bailar con ella al escenario, entre otras anécdotas.
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